Alguien me reprochó en cierta ocasión el glamour (palabra textual) de mis fotografías. Añadió algo así como "¿no tienes fotos normales, de esas en las que soplas velitas en un cumpleaños?" La persona que lo dijo, por otro lado, se dedica (o se dedicaba) a la fotografía y al management de un grupo al que me pidió unirme porque, según él, necesitaban una cantante para un lanzamiento bestial. Naturalmente, no me había oído cantar ni conocía nada de la música que, por entonces, yo venía haciendo: sólo había visto mis fotos glamourosas, de lo cual era fácil deducir cuál iba a ser mi papel en el grupo. Eso fue hace un año, y no he vuelto a saber de él, ni del grupo que se iba a hacer multiconocido. Por cierto, cuando negué su amable invitación, también me reprochó que no quisiera ser famosa y que prefiriese dedicarme a terminar la carrera.
Todo esto (perdón por la sorna) lo digo para mostrar esta foto normal, tomada hace unos meses con un móvil que ya no es de la última generación, con poca resolución y sin soplar velitas. Algo es algo.
2 commentaires:
¡Ja, ja! ¿Todavía no lo habéis encontrado? Si lo llego a saber... con vosotros no hubiese dudado mi respuesta, ni un sólo segundo hubiese dudado en lanzarme a vuestra piscina en febrero...
jajajaja, me ha encantado tanto el post, como los comentarios. Encontrar batería es más difícil que encontrar trabajo, quizá por eso es una palabra tan parecida a "lotería". Y la foto, si, "normal" en su forma, pero el glamour está en la mirada del fotógrafo, del retratado o de ambos, y en tu caso, Rosanna, uno de los dos nunca falla.
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