19 janvier 2005

Blah Blah Café

-La educación judeocristiana que recibe la mayoría de las personas hace que los chicos sean demasiado lanzados y las chicas seamos demasiado recatadas. Y tenemos que reconocer que es difícil salir de ese juego.
-Y luego, cuando dejáis abierto vuestro secret garden, generalmente es para cerrar las puertas y no permitir que salga la presa.
-No todas somos así, ¿tú crees que yo lo soy?
-Estaba generalizando, no se trata de poner nombres, mujer.
-Además, cuando la dejas abierta, o indicas cuál es el camino de salida, te conviertes en una puta, una tía caliente o lindezas como esas, pero cuando es el chico el que sale y entra, es un macho, un ligón, etc.
-Supongo que estás generalizando también. Vale, si es así, lo acepto.
-Y luego, ¿para qué las prisas? Después no duráis nada, jaja.
-¿Sigues generalizando, verdad? No lo dirás por mí...
-No lo sé –jaja-, nunca me he acostado contigo. ¿Cuánto aguantas tú? ¿Cuánto aguanta tu chico, eh?
-Depende, hay veces que nada, jaja.
-Oye, sin ofender, no te aproveches de que estoy rodeado. Además, dicen los sexólogos que el orgasmo debería llegar no más tarde de un minuto. Y eso vale tanto para vosotras como para nosotros.
-¿Un minuto? ¿Tan poco? Seguro que eso lo dicen “los sexólogos” y no “las sexólogas”. Claro, ellos tampoco aguantan más de un minuto, jaja.
-O sea, que te pillé. Vamos, que tú también tardas un montón en llegar al orgasmo.
-¿Y tú qué haces preguntándole a mi amiga esas cosas? A ver si voy a tener que contar yo aquí algunos detallitos que... jaja.
-¿Sabéis qué es lo mejor de todo? Que estemos hablando de estas cosas aquí, alrededor de unos cafés, con tanta naturalidad. Que se hagan bromas, que nos riamos del sexo, todo eso... ¿me entendéis?
-¡Claro que te entendemos, pero tú no has soltado ni prenda, jaja!

La vie en Rose, 1
Baltasar se pasa el día sentado sobre el sillón de la terraza, mirando la ciudad con la atención de lo nuevo siempre, la gente que asoma en los balcones del edificio de en frente, los niños que juegan en el parque de abajo, las ambulancias que cruzan la calle a toda velocidad... sé que por tenerlo dentro de casa también lo estoy condenando a perder su instinto animal, ese mismo que alguna vez tuvimos y destrozamos a base de represión, pero él no se queja por ello, sino más bien al contrario. Ahora, con F en casa, y después de algunos momentos de extrañeza, no sólo ha asumido la nueva situación sino que, además, ya lo considera como alguien más del clan. Esta noche ha dormido a su lado, ha ronroneado con él como conmigo, se recoge a sus abrazos igual que a los míos. También F ha tenido que poner de su parte, claro, pero ya somos tres. Ojalá algún día dijese algo, seguro que tendría mucho que enseñarnos sobre la condición humana.

Musictoday: Give Up, The Postal Service. Nightbooktoday: Música para camaleones, de Truman Capote (relecturas...). Wordstoday: "Soy alcohólico. Soy homosexual. Soy drogadicto. Soy un genio", cómo no.

Aucun commentaire: